La Gran Esfinge es uno de los monumentos más singulares y fascinantes de la meseta de Guiza y del mundo. Forma parte del complejo de la pirámide de Jafre en Giza, lo que lleva a muchos arqueólogos a creer que fue construida durante el reinado de Jafre como parte de su pirámide y templos asociados. La Gran Esfinge fue parcialmente tallada en un afloramiento de piedra caliza existente en Giza y posteriormente construida hacia el exterior con mampostería de piedra para completar la figura de un león con cabeza de humano.
Algunos arqueólogos especulan que la cabeza humana de la Gran Esfinge está tallada a semejanza del faraón Jafre. Frente a las patas de la Esfinge hay un templo conocido como el Templo de la Esfinge. Este templo está justo al lado del Templo del Valle de Jafre, y la calzada monumental que va del Templo del Valle a la Pirámide de Jafre bordea el extremo sur de la Gran Esfinge.
En el Reino Antiguo, la Esfinge probablemente estaba pintada de blanco, pero en el Reino Nuevo, el faraón Tutmosis IV desenterró la Esfinge de la arena y la pintó de rojo. También hizo colocar una estatua bajo la barba de la Esfinge y una estela entre las patas. Esto se llama la Estela del Sueño. La Gran Esfinge mide aproximadamente 73 metros o 240 pies de largo y 20 metros o 66 pies de alto.
La Gran Esfinge es una de las figuras más emblemáticas del Antiguo Egipto y aparece en muchos lugares de la cultura popular actual. Es probable que en la antigüedad también tuviera un significado religioso especial, ya que hay muchos pequeños santuarios alrededor de la base de la Esfinge.
